He besado a más chicas en la secundaria de las que me gustaría recordar. Sin embargo, la única chica que siempre quise que se enamore de mi era la novia de mi mejor amigo.
Ver la obsesión de Lisa con Tony ha sido una tortura durante años. Pero este verano, Tony se involucró con otra persona y me pidió que distrajera a Lisa de su dolor. ¡Demonios, al fin entre al juego!
Sutilmente, la seduzco, primero la ingreso a mi equipo de fútbol y luego en mi fiesta. Ella me llama un playboy insufrible. Bueno, ella todavía no me conoce. Algunos entrenamientos de fútbol uno a uno podrían hacerla cambiar de opinión. Sin embargo, el beso de tequila después no fue una idea tan brillante. ¿O sí?