El Servicio de Cambio Climático Copernicus predice que 2024 superará este récord, alcanzando una temperatura media de 1,66 °C. Este aumento alarmante se debe a la confluencia del cambio climático inducido por las emisiones de gases de efecto invernadero, la deforestación y el fenómeno de El Niño, que ha intensificado las temperaturas en el océano y la atmósfera. La investigación comenzó con un análisis bibliográfico documental de la dependencia de los combustibles fósiles en los países más contaminantes. Se encontró que China, Estados Unidos, India, Rusia y Japón dependen en un 90%, 90%, 100%, 95% y 90%, respectivamente, del carbón, petróleo y gas natural. Posteriormente, se examinó la tasa de deforestación en los últimos cinco años, observando que en América del Sur se deforestaron 50 millones de hectáreas, 30 millones en África, 25 millones en Asia y 5 millones en América del Norte. Al analizar la variable de cambio de temperatura media global, se aplicó la prueba de Shapiro-Wilk para verificar la normalidad de los datos. Se evidenció que la distribución se desvía de la normalidad. Mediante un modelo de pronóstico de regresión lineal año por año, se proyecta que la temperatura seguirá aumentando hasta alcanzar 2,07 °C en 2030. Esta Investigación encontró que hemos superado en los últimos 60 años, en más de cinco veces la capacidad de la atmosfera en 200.000 megatoneladas para soportar CO2. Las consecuencias ambientales de este calentamiento serán severas. Los inviernos tendrán temperaturas bajo cero, mientras que los veranos serán extremadamente calurosos, con sensaciones térmicas que podrían superar los 50 °C al inicio del año, coincidiendo con el fenómeno de El Niño en las zonas tropicales. Estas condiciones afectarán gravemente la salud de aproximadamente 350 millones de personas, quienes quedarán sin acceso a agua potable, expuestas al calor extremo o a las heladas invernales, y al aumento del nivel del mar. Es crucial tomar medidas urgentes para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, proteger los bosques y mitigar los efectos del cambio climático. De lo contrario, nos enfrentamos a un futuro con graves consecuencias para la salud humana y el planeta.