El libro estudia las cosmogonías de las antiguas civilizaciones y el surgimiento del pensamiento racional en la Grecia Clásica con filósofos como Tales, Anaximandro y Heráclito. Luego analiza las teorías cosmológicas de Aristóteles, Claudio Ptolomeo y Nicolás Copérnico.
Posteriormente, se examina el origen de la cosmología moderna con la teoría del Big Bang, explicando conceptos como la radiación de fondo de microondas, la Ley de Hubble y la noción de "singularidad" al momento del origen del universo.
El autor argumenta que la teoría del Big Bang tiene graves problemas, desde paradojas matemáticas a analogías defectuosas entre fenómenos naturales y no naturales. Concluye que esta teoría otorga propiedades exóticas a la materia, reflejando más las mentes de sus creadores que el funcionamiento real del universo.
En definitiva, un recorrido riguroso que invita a replantearse críticamente las bases de la cosmología moderna para dar pasó a explicaciones más coherentes con las leyes fundamentales de la naturaleza sobre los orígenes del cosmos.