Afirmar su identidad genuina puede ayudarlo a perseverar en las crisis.
Afrontar una crisis se puede comparar con aterrizar repentinamente en un planeta extraño después de viajar por el espacio a la velocidad de la luz.
Su presencia física fue transportada al planeta recién descubierto, sin embargo, sus facultades cognitivas aún no se han adaptado a este nuevo entorno. Todavía te estás comportando y razonando de manera consistente con la Tierra.
Después de una crisis, se notan fácilmente algunos cambios. Tras la muerte de un ser querido, uno toma conciencia de su ausencia. Después de la disolución de tu matrimonio, te das cuenta de que ahora estás durmiendo en soledad.
Sin embargo, estos sucesos angustiosos también plantean un desafío para su sentido de sí mismo y, a menudo, es posible que no lo reconozca o acepte de inmediato.
El punto principal transmitido es que aceptar su identidad genuina puede ayudarle a resistir situaciones difíciles.
En ocasiones, la vida puede hacer que te sientas abrumado y que tu identidad sea profundamente inestable. Ahora, examinemos tres métodos mediante los cuales una crisis puede alterar su identidad y las estrategias adecuadas para gestionar cada uno de ellos.