Se trata de analizar en las Leyes y Ordenanzas reales de la Corona española del siglo XVI, las más significativas, por impulsar el buen trato y pacificaciones para la población de los naturales o indígenas después del descubrimiento de América. Incluso, otras en el siglo XVII, insistiendo en el buen trato a los naturales o indígenas encontrados en las nuevas tierras, en las exploraciones y conquistas.
Documentos sustentados desde un humanismo católico que promovieron su protección, sin embargo, lamentablemente, fueron irónicas las acciones en la realidad de las conquistas, a lo que algunos frailes insistieron en mitigar. En ese contexto se dieron algunos territorios en las ciudades refundadas y en el ámbito rural para tener a la población cercana por muchas razones en los barrios con condiciones particulares para alojarlos, darles espacios para habitación y sus múltiples actividades, como para el culto religioso. Los hallazgos enfatizan las condiciones urbanas, territoriales y arquitectónicas en los lugares cercanos a los poblados y ciudades refundadas como un espacio sincrético novohispano en varias regiones e incluso de Latinoamérica, así como exponer la relación, aunque no explícita en las leyes, si en la realidad. Las conclusiones permiten comprender las circunstancias territoriales en la colonización y refundación de asentamientos de los barrios como parte de lo que hoy por hoy es parte del patrimonio cultural. Patrimonio tangible edificado y urbano en lo material e intangible o inmaterial costumbres y tradiciones que mantienen una identidad.

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