Todos tenemos una historia de abundante adhesión, tenemos derecho a vivir y luchar por ese cúmulo sentimientos que nos hacen creer que es posible, que nos pueden ilustrar cuan bello es el cielo y cuán férvido puede ser el averno. No se puede dar espacio a la separación dentro del amor, porque su afecto es simple y llanamente una emoción, una impresión que da color a nuestro ser. Muchos tras un sueño, pocos dispuestos a dar todo por el todo; unos ríen, otros lloran; otros intentan, algunos fracasan o se rinden. Así es como debe ser, diversidad en todo y para todo, por eso, activistas del libre albedrío darán todo por proporcionarle color a nuestras vidas, la libertad no la tienes que ganar, ya naces con ella. Hay de sueños a sueños que se hacen realidad, como el par de enamorados que se atrevieron a darse un beso en público, retando a la sociedad a llevarlos a luchar por lo que etiquetaron como amor diferente.
—Dindar