El veneno nos ha llegado como eco de las grandes culturas antiguas, ya sea para castigar a quienes profanaban las tumbas egipcias o para ser inoculado a través de la ponzoña de la serpiente que teóricamente mordió a Cleopatra. Agripina, Calígula o los Borgia hi-cieron del envenenamiento casi un arte. Era la forma más fácil, cómoda y discreta de poner en los brazos del Altísimo a un pontífice molesto, un candidato peligroso o a un rey un tanto díscolo. Un entretenido repaso a algunas de las historias ligadas al uso del veneno desde la Antigüedad -empleado como elemento de caza- hasta nuestros días. El arsénico, el cianuro, el polonio o los modernos agen-tes tóxicos se han usado a lo largo de la historia para acabar con los enemigos, tratando de no dejar rastro. Reyes, papas, sacerdotes, cortesanas, todos ellos tienen cabida en estas páginas a través de los complots, las tramas y las pócimas que los hicieron célebres.
The poison has reached us as an echo of the great ancient cultures, either to punish those who desecrated the Egyptian tombs or to be inoculated through the venom of the snake that theoretically bit Cleopatra. It was the easiest, most comfortable, and discreet way to end the life of an annoying pontiff, a dangerous candidate, or a somewhat wayward king. This book is an entertaining review of some of the stories linked to the use of poison. Kings, popes, priests, and courtesans all have a place in these pages through the plots and potions that made them famous.